domingo, 10 de mayo de 2009

Pie de foto

Cójase una foto, si es posible al azar o proporcionada por otra persona, de una revista o de donde te pudiera dar más coraje o placer. Tras contemplarla con el detenimiento necesario, aunque no excesivo, trata de escribir, o no lo hagas, algo como esto, o todo lo contrario. No incluyas la foto. Me gustaría que, al menos, hicieses el comentario que creas oportuno sobre la actividad y el texto.

PIE DE FOTO

Si de ruinas me hablas, piedra a piedra escucho el eco. Siempre quedó entre tú y yo un espacio similar a la amargura en la que se desfonda el color. Ya sé que contigo hubiese sido imposible que las campanas volviesen a convocar el deseo que enciende, pero sé también que lo que hemos sido sigue en el aire como un cuchillo, como el musgo o la sal con que el pacto que hicimos se rompió en mil ausencias que no supe aprehender para nunca ser esto. Pero el día no miente. Y la noche, tampoco. Y entre tanto despojo, el aullido del tiempo se ha quebrado en tus vidrios desangrándose en mí, piedra a piedra cayendo, derrotado intento, del amor que no pudo mantenerse en pie.

Carlos Alcaide Romero

3 comentarios:

  1. PIE DE FOTO

    La llama se encendía una vez más, consumiendo la cerilla poco a poco. Ella también fue siempre puro fuego, pero nunca encontró a quien calentar. Es un juego de niños, y a ambos les gusta jugar. Son como las estrellas de la noche que se iluminan la una a la otra con una luz tenue, que a medida que se acercan se apaga y deja a ambos solos en la oscuridad. Y la cerilla sigue consumiéndose, y ellos siguen jugando. No es el juego del amor lo que les hace reírse, es el tacto y el aroma de lo prohibido, el juego de poder y la imagen de la noche eterna lo que provoca el sentimiento de vitalidad que envuelve sus cuerpos. El tacto se transforma en el único sentido válido, y al igual que la llama se fusiona con la cerilla hasta extinguirse, el fuego de ambos se une en la oscuridad, en el eterno juego prohibido, hasta que su llama se consuma con la noche.

    -Arturo-

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  2. Carlos, como siempre texto impresionante. Cojonudo. Pero habría quedado mucho mejor con la foto. Ver la foto y debajo el texto que ha inspirado sería la hostia.

    Juan Pe, taller Adolfo.

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  3. Para mí este es el mejor texto. Muy redondo, empieza fuerte y no decae. Se mantiene la emoción y está bien rematado.

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